Rechazamos en los términos más enérgicos las declaraciones de funcionarios israelíes que llaman a la anexión de la Cisjordania ocupada.
Estas declaraciones, que desafían el derecho internacional y la solución de dos Estados, son la prueba de que el objetivo último de Israel es la toma de los territorios palestinos.
La impunidad de la política de genocidio y ocupación que Israel aplica contra el pueblo palestino alienta aún más a Netanyahu y a sus partidarios.
El Consejo de Seguridad de la ONU y la comunidad internacional deben adoptar una postura firme contra las políticas ilegales de Israel.